La combinación de métodos morfológicos y filogenéticos en el estudio de la diversidad taxonómica y genética del género Cortinarius, sección Calochroi, en la Península Ibérica ha permitió la identificación de 15 especies conocidas y una nueva especie, Cortinarius ortegae Mahiques, Ballarà, Salom, Bellanger & Garrido-Benavent , que se describe en el artículo publicado en Mycological Progress 2018.
Esta nueva especie de cortinario es una seta robusta, de color pardo-ocrácea, con tintes anaranjados, láminas grisáceo-rosadas a lilacinas y pie corto, blanco y más tarde ocráceo, con un bulbo basal evidente y presencia de un velo o cortina (carácter que le da nombre al género) blanquecino y esporas amigdaliformes, ornamentadas con verrugas…Vive en encinares sobre suelos calcáreos.
Los investigadores han depositado en la Colección Micológica “Profesor Antonio Ortega”, también dedicada a su principal colector e investigador, un fragmento de uno los ejemplar (isotipo) sobre los que se describió la nueva especie. Se enriquece así la colección de cortinarios que alberga el Herbario de la Universidad de Granada y que es fruto de las investigaciones que durante más de 40 años llevó a cabo el Dr. Antonio Ortega.
Además, en dicha publicación se proporciona una clave dicotómica para el reconocimiento de campo de las especies de cortinarios de la sección Calochroi que habitan en los diferentes bosques ibéricos. También ofrece información sobre los análisis de polimorfismo de algunas especies estudiadas que muestran que la distribución de linajes intraespecíficos depende de la geografía y, en algunos casos, del árbol hospedador. Además, los análisis de datación sugieren que la diversificación de este grupo empezó en el Plioceno y la mayor parte de la diversidad genética actual se originó en el Pleistoceno. Este escenario temporal soporta la hipótesis de que las oscilaciones climáticas del Cuaternario pueden haber impulsado la evolución de este grupo de hongos ectomicorrízicos.